Introducción
La maloclusión de clase III presenta una prevalencia de un 1 a un 5% en la población blanca, siendo mayor (un 13%) en la población asiática.(1)(2) Según un estudio de la OMS en 1983, en España, la maloclusión de clase III tenía una incidencia de un 5,6% en la población en edad escolar y se elevaba a un 10 % entre los pacientes que demandaban tratamiento ortodóncico. ( Orts, 1983).(3)
Los pacientes de clase III suelen llegar a las consultas de ortodoncia a una edad temprana. Hoy en día todavía se nos plantean dudas al enfrentarnos a las maloclusiones de clase III ¿Es ese momento el más idóneo para empezar un tratamiento de ortodoncia? Si nos decidimos a tratarlo en edad temprana, ¿cúal es el tratamiento más adecuado y más beneficioso para el paciente?, ¿O es mejor esperar la finalización del crecimiento del paciente para realizar un enfoque ortodóncico u ortodóncico-quirúrgico del caso? Los pacientes adultos que demandan tratamiento de ortodoncia en numerosas ocasiones rechazan el tratamiento quirúrgico por diversas razones. ¿El tratamiento temprano puede ser beneficioso en esos pacientes o por el contrario puede producir compensaciones dentarias desfavorables para un tratamiento quirúrgico posterior?
La maloclusión de clase III suele ser debida a un maxilar retruido o hipoplásico combinado con un prognatismo mandibular. Son pocos los casos en los que la causa sea sólo por prognatismo mandibular. Ellis y Mc Namara concluyen que de 302 pacientes con maloclusión de clase III de su estudio, en un tercio de ellos ésta era de causa maxilar. Sue y cols obtienen resultados similares, siendo un 62% de la muestra de su estudio los que la causa de su maloclusión era una retrusión maxilar.(4)(5) Estos pacientes además suelen presentar compresión maxilar, por lo que el tratamiento temprano de las maloclusiones de clase III se realiza frecuentemente mediante expansión maxilar y tracción anterior desde máscara facial.(6) En el artículo de revisión de Asensi Cros sobre clase III y ortopedia observamos que en la mayoría de los artículos revisados el tratamiento realizado fue de disyunción junto a tracción anterior desde máscara facial; en menor medida los casos fueron tratados con mentonera o placa de progenie. Todos esos estudios muestran en sus resultados cambios óseos y dentarios debido al tratamiento.