LA REABSORCIÓN RADICULAR
La reabsorción radicular se define como la pérdida de tejido dental como resultado de la acción odontoclástica. De forma general, la podemos clasificar por su localización en relación con la superficie radicular, en interna y externa(1).
La reabsorción radicular apical externa (RRAE) se describe como un proceso fisiológico o patológico con pérdida de cemento o dentina, dando como resultado un acortamiento del ápice de la raíz. Este fenómeno se ha asociado con frecuencia con el tratamiento ortodóncico(2), aunque por el momento se desconoce cómo influye en la reabsorción radicular. La etiología es compleja y multifactorial, sin embargo, podemos decir que la RRAE resulta de la combinación de la variabilidad biológica individual, la predisposición genética y el efecto de factores mecánicos(3).
La reabsorción radicular es un efecto indeseado ya que puede afectar la viabilidad a largo plazo de la dentición, y la literatura sugiere que los pacientes sometidos a tratamiento de ortodoncia son más propensos a tener reabsorción radicular apical severa. Por ello, es importante identificar qué factores del tratamiento ortodóncico contribuyen a la reabsorción radicular para minimizar los efectos secundarios y reducir la incidencia de reabsorción(3).