Introducción
El mundo de la Odontología viene experimentando desde hace años una transformación radical con la ya establecida irrupción de la tecnología digital. En especial, la incorporación de softwares digitales y el análisis en 3D han revolucionado la forma de diagnosticar, planificar los tratamientos, evaluar los tratamientos ortodóncicos(1)(2)(3) y las cirugías ortognáticas de los pacientes.(4)
Tradicionalmente estos procedimientos de diagnóstico y planificación se llevaban a cabo mediante registros fotográficos tomados desde distintos ángulos y registros radiográficos convencionales en 2D, que a pesar de ser métodos cómodos y económicos presentaban varias limitaciones.(5) La antropometría directa se desarrolló para superar estos inconvenientes y permitir realizar mediciones lineales.(6)(7)(8)(9)(10)
Las cámaras faciales tridimensionales son dispositivos que registran una fotografía facial en pocos segundos y generan una imagen en tres dimensiones.(11)(12)(13)
Existen dos tipos de cámaras 3D, las integradas y las portátiles. Las integradas son grandes y fijas, debido a sus dimensiones se necesita destinar una habitación exclusivamente para su instalación y uso. Por otro lado, tienen un coste elevado. Las portátiles tienen un tamaño reducido y un coste menor, pero a pesar de ser portátiles como su nombre indica, son muy sensibles a la luz, por lo que no es recomendable su utilización en exteriores.(14)
En cuanto a su mecanismo de funcionamiento, ambos tipos de escáneres funcionan por triangulación trigonométrica que consiste en que el proyector que emite la luz sobre el objeto que se quiere digitalizar y la cámara (o cámaras) forman un triángulo.(13)(15)(16)(17) El beneficio de la tecnología de luz estructurada es la rapidez con que se puede digitalizar una pieza. Tanto es así que se puede realizar un escaneo en pocos segundos y el área de escaneo también es bastante grande. Además, son sistemas extremadamente precisos y ofrecen una alta resolución.(15)
Un escáner facial genera un formato de archivo digital específico como el lenguaje de teselación estándar (STL), la teselación con caras poligonales (OBJ), o archivos de polígonos o triángulos de Stanford (PLY). Un archivo STL describe únicamente la geometría de un objeto digitalizado sin ninguna representación de color, textura u otros atributos CAD. En cambio, los archivos OBJ y PLY almacenan información relativa a la superficie, el color y la textura de la superficie.(18)