Introducción
La ansiedad dental se considera uno de los desórdenes psicológicos más prevalentes en la población actual. Se considera que el concepto de ansiedad se refiere a un complejo patrón de conducta asociado a una activación fisiológica, que ocurre en respuesta a estímulos internos (cognitivos y somáticos) y externos (ambientales), que pueden aparecer antes y durante el tratamiento odontológico en los pacientes, sin que lo identifiquemos(1).
Los factores psicológicos pueden desempeñar un papel crítico en la determinación de la respuesta subjetiva del paciente a la fuerza de ortodoncia y podría explicar las variaciones considerables en la intensidad del dolor.(2) Sergl et al informaron que la percepción del dolor es menor en aquellos pacientes que son conscientes de la complejidad de su tratamiento y que son capaces de controlar sus emociones(3). Aunque existen numerosos estudios que hacen referencia a la ansiedad dental en pacientes odontológicos no se ha estudiado lo suficiente en pacientes ortodóncicos. Esto se puede deber a que la ortodoncia no está relacionada con métodos invasivos como la odontología general: las agujas de la anestesia, sonidos de instrumentos rotatorios(4)…
La ansiedad dental se define como una situación que ocurre en respuesta durante el tratamiento de ortodoncia, puede iniciarse por el tratamiento o previo a él debido al desconocimiento de la situación. Este desconocimiento previo al tratamiento, tiene repercusiones en el paciente ya que su plan de tratamiento puede verse afectado y en el trabajo del ortodoncista que no se puede desarrollar con eficacia. Es importante para el odontólogo y los pacientes comprender la influencia de los factores psicológicos. Métodos conductuales tales como “hablar”, la distracción, son los más utilizados en el tratamiento de los pacientes temerosos y ayudan a crear un ambiente más favorecedor(5)(6).
A la consulta acuden muchos pacientes con ansiedad tanto al tratamiento como al sillón dental. La actitud hacia los dentistas demuestra una fuerte relación lineal con la ansiedad dental, lo que a su vez podría afectar el plan de tratamiento dental. Por lo tanto, la evaluación del nivel de los pacientes de la ansiedad mediante un cuestionario antes del tratamiento dental puede conducir a la modificación del plan de tratamiento según sea necesario(7)(8).